Uno de esos finales que te parece perfecto, pero que con el tiempo te das cuenta de que no, todo lo que antes te parecía maravilloso, ahora no es más que una simple cosa que te saca una sonrisa durante cinco minutos. Te das cuenta de que lo que para tí era perfecto, no tiene nada de bueno. En realidad son defectos, que quieres pasar por alto, y que parece que lo consegues, pero que te pudren por dentro sin darte cuenta. . Esos defectos hacen a la persona que quieres real.
Pero la realidad duele, se tiene que acabar.